Hace algo más de un año descubrí esta canción cuando más lo necesitaba. Con esta canción encontré, sin pensarlo, un motivo para "volver" y, por supuesto, caló muy hondo en mi.
Había escuchado hablar de Fabián, un cantautor leonés al que no había prestado demasiada atención porque andaba algo desconectado de este estilo. Después de unos años, la canción de autor había quedado aparcada a pesar de haber sido tan importante para mi. Pero en el momento más adecuado escuché esta canción y lo cambió todo: volví a sentirme atraído por la manera de comunicarse de los cantautores y corrió dentro de mi la sensación de no entender cómo había pasado estos últimos años sin descubrir a este "talento", cómo no había podido acercarme a él antes.
Me enganché profundamente a Fabián. Le compré sus discos vía internet (directamente a su propia discográfica) y comencé a soñar con cada una de sus canciones. Nunca me he atrevido a escribirle para decirle todo lo que me han hecho sentir sus canciones en este último año, pero sin duda se ha hecho un hueco indispensable en mi día a día. Su forma de cantar susurrándote al oído, la sencillez de sus melodías, pero de un profundo calado, y sus paisajes que te atrapan como si fueran tus propias historias en sus letras, me han llevado a reivindicar a este artista y a recomendar su escucha a todos vosotros.
De verdad que va a merecer la pena. Para mi no fue solo un descubrimiento. Gracias Fabián, gracias por permitirme "volver" en lugar de "huir".
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